¿No que muy acá? Consola de 1977 vence a ChatGPT en partida de ajedrez
Tablero del Fin del Mundo.- En algo que ni a James Cameron se le habría ocurrido, enfrentaron en una partida de ajedrez a un Atari contra ChatGPT… y pues la consola de 1977 resultó vencedora.
Recordemos que el Atari 2600, creado en 1977, fue una de las primeras consolas de videojuegos en salir al mercado, y sentó las bases para que luego surgieran Nintendo y el vasto universo gamer que hoy disfrutamos (aunque los boomers sigan creyendo que son “jueguitos para niños”).
Atari 2600 beats ChatGPT in chess match 🤖♟️
In a surprising technological mismatch, a 1977 Atari 2600 console with just 128 bytes of RAM and a 1.19MHz processor “absolutely wrecked” OpenAI’s ChatGPT in a chess match, as infrastructure architect Robert Caruso demonstrated when… pic.twitter.com/38KknpUxPE
— Vertrose (@vertrosex) June 10, 2025
Desde entonces, la tecnología ha avanzado a pasos agigantados hasta llegar a la era actual, donde los sistemas de Inteligencia Artificial ya están presentes hasta en el microondas.
El ajedrez está a salvo de las garras de la IAFue así que un sujeto de nombre Robert Caruso, arquitecto de infraestructuras y claramente con mucho tiempo libre, decidió enfrentar a la IA de OpenAI contra el programa Atari Chess. El resultado fue, por decir lo menos, humillante para ChatGPT.
Caruso utilizó un emulador de la mítica consola Atari en una máquina con un procesador de 1.19 MHz y 128 bytes de memoria RAM (o sea, nada), frente al sofisticado sistema de ChatGPT… y aún así, la IA fue “barrida del tablero”.
ChatGPT Talked Shit To A 48-Year Old Atari 2600, Proceeded To Get Destroyed In A Game Of Chess (With Atari On Beginner Mode) https://t.co/BmjSqwLXog pic.twitter.com/aLFXfLkIKL
— Barstool Sports (@barstoolsports) June 12, 2025
“Fue absolutamente destrozado en el nivel principiante. La IA cometió errores garrafales: confundió piezas, ignoró amenazas evidentes y mostró una falta total de ‘conciencia del tablero’. En un primer intento, culpó de sus fallos a la representación gráfica rudimentaria de las piezas del Atari, diciendo que eran demasiado ‘abstractas‘”, explicó el entusiasta de las damas chinas.
A pesar de que Caruso le comunicó los movimientos de forma textual para evitar cualquier pretexto gráfico, la IA siguió cometiendo pifia tras pifia, confirmando que esta tecnología aún está “en pañales”… y dándole así un respiro a la humanidad que ya estaba a punto de esconderse en búnkers por si Terminator se volvía profecía.
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