El error que todos cometen con el móvil en verano y que podría destrozarlo para siempre

Las altas temperaturas que trae el verano no solo afectan a las personas, también dejan consecuencias tangibles en los dispositivos electrónicos, sobre todo, en los 'smartphones' que acompañan a los usuarios en cualquier momento y pueden mostrar signos de mal funcionamiento, por lo que conviene tener en cuenta ciertas precauciones básicas para cuidar su salud, como no exponerlo al sol.
El uso del 'smartphone' en verano puede someterlo a condiciones inadecuadas y causar serios daños en sus componentes, como la batería o la pantalla, que a su vez pueden trasladarse en un funcionamiento más lento del dispositivo, incluso llegando a apagarse en situaciones de sobrecalentamiento extremas.
Cómo evitarloPara evitar estas situaciones perjudiciales, los usuarios han de tener en cuenta algunas precauciones básicas a la hora de utilizar su móvil durante el verano, comenzando por no exponerlo directamente al sol, mucho menos durante periodos largos.
No obstante, si ocurre un descuido, por ejemplo, olvidando el 'smartphone' en el salpicadero del coche, es recomendable apagarlo completamente para evitar que siga funcionando. Igualmente, se ha de retirar la funda en caso de que lleve una, ya que este tipo de complementos, habitualmente fabricados con plástico o silicona, no ayudan a la disipación del calor.
También es aconsejable trasladar el teléfono a una superficie fría o a un ambiente más fresco, como puede ser una encimera de piedra o una habitación refrigerada, para ayudar en el proceso de enfriar el dispositivo. Sin embargo, facilitar el enfriamiento no debe confundirse con enfriarlo de golpe utilizando métodos más agresivos, ya que esto puede dañar aún más los componentes por el cambio brusco de temperatura.
A tener en cuentaOtro factor a tener en cuenta es que, si cuando el móvil se ha sobrecalentado está conectado al cargador, se ha de desenchufar rápidamente, ya que el proceso de carga del dispositivo aumenta la temperatura del mismo todavía más. De hecho, es posible que el 'smartphone' adquiera más temperatura cuando esté cargando, incluso si no está expuesto al sol. En este caso, si la pantalla o la parte trasera están calientes, también se deberá retirar del cargador.
Además de todo ello, es relevante ayudar a controlar la temperatura del dispositivo quitándole carga de trabajo. Por ejemplo, cerrando aplicaciones en segundo plano que no se estén utilizando, activando el modo ahorro de energía, reduciendo el brillo de la pantalla o, incluso, activando el modo avión o desactivando la conexión Bluetooth y WiFi.
eleconomista