Aversión a Zelenski, hostilidad hacia la UE y la OTAN... El gran cambio de alianzas de Donald Trump a favor de Rusia

Donald Trump no puso fin a la guerra en Ucrania en 24 horas como prometió. Por otra parte, ha logrado casi en el mismo tiempo alterar el orden internacional con un giro estratégico hacia Rusia, sorprendiendo a sus aliados y adversarios por igual. Al culpar a Ucrania como si fuera responsable de la invasión rusa, al llamar dictador a su presidente Volodymyr Zelensky antes de exigir el reembolso en especie de la ayuda militar proporcionada por su país, Trump se ha unido prácticamente al campo de los adversarios de Ucrania, acercándose a las tesis de Putin, haciendo suyas sus exigencias de una Ucrania neutralizada y sin poner en tela de juicio sus conquistas territoriales.

Esta repentina alineación del presidente norteamericano con una potencia revisionista decidida a derrocar el orden mundial ha asestado un golpe al edificio estratégico construido por sus predecesores desde 1945 y que había contribuido a la prosperidad y el prestigio de Estados Unidos.

La política exterior estadounidense tiende a ser bastante volátil, en parte debido a los cambios democráticos que a veces ocurren de una administración a la siguiente.

Sean McMeekin Profesor de Historia Europea

Sin conflicto…

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