Presupuesto 2026: Cuentas públicas en números rojos durante 50 años

Este texto es una transcripción de parte de la entrevista anterior. Haga clic en el video para ver la entrevista completa.

Desde Raymond Barre hasta François Fillon, reducir el déficit presupuestario ha sido una obsesión para todos los gobiernos durante el último medio siglo. Todos sueñan con repetir las palabras de Valéry Giscard d'Estaing de hace 60 años: «Para 1965, presentamos un presupuesto equilibrado. Es decir, todos los gastos del Estado estarán cubiertos por sus ingresos. Y cuando digo todos, es realmente todos». Porque desde que el político dejó el poder, Francia ha aumentado su déficit cada año, sin excepción.

Algunos han logrado limitar el declive, como Jacques Chirac y François Hollande, quienes subieron los impuestos. Otros lo han acelerado, como Nicolas Sarkozy tras la crisis de las hipotecas subprime o Emmanuel Macron durante la epidemia de coronavirus. Una vez más este año, el gobierno da la voz de alarma. «Cada segundo que pasa, la deuda francesa aumenta en 5.000 euros», declaró François Bayrou. Un déficit que ahora se sitúa en el 5,8% del PIB. El gobierno pretende reducir esta cifra al 4,6%. Los recientes anuncios de François Bayrou pretenden que el gobierno cumpla con este nuevo objetivo.