Aranceles, inflación e inestabilidad económica: los operadores bajo presión. Más de la mitad ve un futuro sombrío.

La inflación, el aumento de precios y la inestabilidad económica siguen presionando a las pequeñas empresas italianas: el 35 % de los comerciantes se muestra pesimista sobre el futuro de su negocio debido al aumento de los costes, las dificultades de suministro y los cambios en los hábitos de consumo de los clientes . Para 7 de cada 10 comerciantes, las tensiones comerciales entre EE. UU., China y Europa han afectado negativamente a su negocio, con plazos de entrega más largos, el aumento de los precios de las materias primas y la necesidad de adaptar rápidamente su oferta. Además, casi la mitad de los comerciantes señala que los consumidores han reducido su gasto habitual (48,6 %).

El Observatorio de las Pequeñas Empresas de SumUp, fintech activa en el sector de los pagos digitales con soluciones innovadoras para empresas de todos los tamaños, fotografía el estado de ánimo y las estrategias de los comerciantes italianos en un contexto económico todavía inestable, delineando las prioridades para los próximos 12 meses: reducción de la burocracia, acceso más simple y conveniente al crédito y tecnologías digitales accesibles para gestionar pagos, ventas y actividades comerciales.

Las tensiones comerciales registradas en las últimas semanas son la principal preocupación de los comerciantes italianos, que operan en un contexto económico cada vez más complejo e inestable. La incertidumbre también caracteriza las perspectivas para los próximos meses, sobre las que solo el 40,2 % de los entrevistados se muestra optimista —afirma Umberto Zola , director de Ventas Online para Europa de SumUp—. A pesar de estas dificultades, los pequeños comercios italianos están demostrando una extraordinaria capacidad de adaptación, reaccionando con rapidez y precisión. La diversificación de la oferta, la fidelización de los clientes y una mayor atención a los canales digitales se encuentran entre las respuestas más adoptadas para afrontar la crisis. En este sentido, la tecnología se consolida como una herramienta estratégica, capaz de simplificar la gestión diaria y ofrecer herramientas accesibles para afrontar el cambio con mayor conciencia y eficiencia.

TENSIONES COMERCIALES, LOS PRINCIPALES RETOS PARA LAS EMPRESAS

La inestabilidad en los mercados internacionales y la incertidumbre del consumidor están redefiniendo las prioridades operativas de las pequeñas empresas italianas. Durante el último año, el 49,1% de los minoristas ha tenido que lidiar con un aumento en los costos de envío y las materias primas, mientras que el 23,1% ha experimentado un aumento en los plazos de suministro. En muchos casos, estos problemas críticos han obligado a un cambio en la cadena de suministro (20,1%) y, en algunos casos, a una reducción en la variedad de productos ofrecidos (19,5%). Al mismo tiempo, el comportamiento del consumidor ha cambiado significativamente: el 48,6% de los minoristas informa que sus clientes compran con menos frecuencia o gastan menos, mientras que el 33,1% observa un enfoque creciente en el precio, con un mayor uso de descuentos y comparaciones entre ofertas. El 30,3% también observa una tendencia hacia alternativas más económicas, un signo de mayor fragilidad en el poder adquisitivo y una presión adicional sobre la sostenibilidad de los márgenes.

SOLUCIONES IMPLEMENTADAS POR LOS COMERCIANTES

El 29,7% de los minoristas se ha centrado en lanzar nuevos productos o diversificar su oferta , mientras que una cuarta parte de los entrevistados (25%) ha reforzado sus actividades de marketing y fidelización de clientes. También hay una creciente atención a los canales de venta digitales, señalados por el 12,8% de los minoristas como palanca para ampliar su rango de acción. En cuanto a la estrategia de precios, el 45,4% ha optado por un aumento, del cual el 40,2% moderado, para equilibrar la necesidad de cubrir mayores costes sin alienar a los clientes; mientras que el 19,5% ha optado por reducir los márgenes de beneficio para mantener la competitividad y el atractivo. De cara al futuro, los empresarios indican que el apoyo concreto a su negocio es una prioridad: el 41,4% pide una reducción de la burocracia, el 29,9% espera ayudas y subvenciones (por ejemplo, para los costes energéticos o la adopción de lo digital) y el 17,8% ve un acceso más fácil al crédito y a las herramientas digitales para los pagos y la gestión empresarial (17,8%) como elementos fundamentales para navegar por la incertidumbre con mayor confianza.

LA TECNOLOGÍA Y EL FUTURO : LA IA ENTRA EN LAS PEQUEÑAS EMPRESAS

La tecnología representa un recurso estratégico para optimizar procesos y mejorar la competitividad, tanto que aproximadamente 1 de cada 5 emprendedores ya ha invertido en herramientas digitales para hacer más eficiente la gestión diaria de su negocio. Sin embargo, cuando se trata de inteligencia artificial , el panorama aún parece fragmentado: el 49,4% de los comerciantes dice que no ha adoptado soluciones de IA y no tiene intención de hacerlo, mientras que otro 24,1% dice estar interesado, pero aún no ha comenzado a utilizarla. Solo una minoría ya ha comenzado a integrar la IA en sus actividades: el 17,5% la utiliza para crear contenido para sitios web, redes sociales y marketing, el 9,6% para generar ideas y nuevos productos, y el 7,2% para comprender mejor las expectativas de los clientes. Esto es una señal de cómo la adopción de la inteligencia artificial aún se encuentra en sus etapas iniciales, pero con un importante margen de crecimiento, especialmente en un contexto donde la innovación y la adaptabilidad son cada vez más cruciales para la estabilidad y el desarrollo del comercio local.

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