Muertes que no deben olvidarse; homicidios culposos
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En las estadísticas oficiales respecto de la mortalidad violenta en México, la principal referencia es el indicador relativo a los homicidios dolosos, es decir, aquellos homicidios en los que se acredita la intención de la o el perpetrador, de quitarle la vida a otra u otras personas.
La evidencia disponible
De acuerdo con los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (Secretariado Ejecutivo), entre 2015 y enero de 2025 han perdido la vida, de forma violenta, 474,109 personas. De esa cifra, 179,952 personas fallecieron por homicidios culposos, y 295,649 lo hicieron en eventos catalogados como homicidios dolosos o intencionales. Esto implica que el 62.3% fallecieron por homicidios no intencionales, mientras que el 37.95% fallecieron por lesiones no intencionales. Esto en sí mismo ya es una importante anomalía pues en países donde no hay una violencia generalizada, los datos muestran más homicidios culposos que dolosos. No debe olvidarse, además, que estos datos presentan importantes subregistros respecto de las estadísticas de mortalidad del Inegi.
Ahora bien, la segunda anomalía que se registra, y esta sólo puede ser resultado de dos opciones posibles: o ha habido un grave error de registro, o ha habido una deliberada intención de ocultar o falsear la información. Se trata del caso del estado de Guanajuato. Al respecto, lo primero que es importante destacar, a fin de tener una adecuada dimensión del problema, es que, según el Censo del 2020, esta entidad albergaba el 4.9% de la población total nacional, con 6.16 millones de habitantes.
Una anomalía llamada Guanajuato
Frente a ese indicador, el Secretariado Ejecutivo reporta para Guanajuato, en el periodo señalado, 48,287 homicidios, tanto dolosos como culposos (10% del total nacional); una cifra desproporcionada respecto de su peso demográfico en México. Ahora bien, en lo que hace a los homicidios dolosos, en Guanajuato se han registrado, entre 2015 y enero de 2025, 27,827 homicidios intencionales: 9% del total nacional.
Por su parte, la otra gran anomalía es la relativa a los homicidios culposos, pues, de los 179,952 casos reportados por el Secretariado Ejecutivo, 20,589 se registraron en la entidad, es decir, 11.4% del total nacional, lo cual no tienen ninguna explicación lógica, pues los datos del Inegi corroboran que en esa entidad no se registra tal cantidad de defunciones por accidentes de tránsito. Y en efecto, el Secretariado Ejecutivo ha registrado esos datos en el apartado de “defunciones por otro elemento”.
Es importante destacar que los peores años son del 2017 al 2020, cuando los porcentajes de homicidios culposos de Guanajuato, respecto del total nacional fueron de: 14.9% en 2017; 11.1% en 2018; 14.6% en 2019 y de 16.5% en 2020; en ese periodo el porcentaje anual promedio fue de 14.2%; mientras que entre 2021 y enero de 2025 el indicador es de 8.8%, cifra todavía anómala respecto del peso demográfico de la entidad en el país.
Se trata de un asunto relevante porque, por definición, los homicidios culposos obedecen al azar, por lo que su distribución territorial debería ser aproximadamente cercana al peso demográfico de cada entidad. De esta forma, si se llegase a detectar que los homicidios culposos en Guanajuato tienen una importante proporción que en realidad son dolosos, esto podría alterar los registros nacionales pues se trata de la entidad con mayor mortalidad violenta en el país. El problema amerita que se revise a nivel nacional.
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