El oleoducto libre de François Legault

Quebec es tan virtuoso que somos una de las pocas naciones del mundo que ha renunciado al enriquecimiento por principios.
¡Quebec está contra los hidrocarburos! Tenemos hidroelectricidad. No es cuestión de comprobar si hay aceite en Anticosti. El fallido episodio del gas de esquisto ya había cumplido su cometido.
Fueron necesarias las amenazas de Donald Trump para cambiar la opinión pública, y con ella al Primer Ministro Legault. ¿Por qué no un oleoducto que termine en Sept-Îles?
Nuevo acuerdoFrançois Legault no explicó exactamente por qué cambió de opinión, excepto que el 55% de los quebequenses están ahora a favor de un gasoducto hacia el Este.
El verdadero punto de inflexión parece ser la repentina decisión pro-Canadá del Primer Ministro frente a las amenazas económicas de Donald Trump.
¡No más aceite sucio! De repente, comprendemos la campaña de Alberta (con razón) para liberarse de su dependencia del mercado estadounidense. El plan de Mark Carney de lanzar grandes proyectos pancanadienses está siendo recibido como una solución milagrosa.
El muy criticado corredor energético de Andrew Scheer se ha convertido en la creación del nuevo primer ministro en Ottawa.
Equilibrio de fuerzasBueno para la economía canadiense. Pero lo sorprendente es la rapidez con la que François Legault renunció a negociar su apoyo a un proyecto de este tipo.
¿Qué pide a cambio de su apoyo a un oleoducto o gasoducto que atraviesa nuestro territorio?
Se le excusará por haber renunciado a plenos poderes en materia de inmigración. Pero ¿cuál es el gran proyecto estructurante del futuro de Quebec que Ottawa deberá apoyar a cambio del famoso corredor energético?
La historia nos ha demostrado que, en lo que respecta a los oleoductos y gasoductos, el diablo está en los detalles. Si François Legault quiere realmente poner sus huevos en la canasta del gran proyecto canadiense, tendrá que demostrar que Quebec se beneficia de él. Hasta ahora, todavía estamos buscando las famosas ganancias.
LE Journal de Montreal