Movimiento pide acabar con el precribado a través del SNS Embarazadas

El Movimiento Democrático de Mujeres (MDM) responsabilizó este domingo al Gobierno por las fallas en los servicios de ginecología y obstetricia y defendió el fin del precribado telefónico a través de la línea SNS Grávida.
“El MDM rechaza que se culpe a los profesionales sanitarios o una supuesta falta de organización de los servicios, cuando lo que está en juego es precisamente la falta de condiciones para que cualquier organización funcione”, afirma el movimiento en un comunicado.
En concreto, el MDM se refirió al reciente caso de una mujer de Barreiro que perdió a su bebé tras ser trasladada al hospital de Cascais, pero también destacó la “grave y continua degradación” del Servicio Nacional de Salud (SNS), en particular los servicios de obstetricia de urgencia.
Al referirse a la falta de profesionales, la realización de horas extras más allá de los límites legales y la falta de equipos e instalaciones adecuadas, el movimiento advierte que “ningún servicio resiste este escenario de desinversión y desgaste” y atribuye la responsabilidad al ejecutivo, al que acusa de desconocer los derechos de las embarazadas a acceder a la atención sanitaria.
Por ello, abogan por un conjunto de medidas, entre ellas la “revocación inmediata” del precribado telefónico obligatorio, a través de la línea SNS Grávida, que según afirman presenta lagunas y retrasa el acceso a la atención urgente y esencial.
El movimiento también aboga por el refuerzo de los recursos humanos y materiales en las maternidades y salas de parto, la valorización de la carrera y los salarios de los profesionales, el aumento del número de vacantes y procesos de contratación más rápidos en las especialidades de ginecología/obstetricia, anestesia, psicología y pediatría, así como la ampliación de la cobertura de neonatología a más regiones del país.
“Exigimos que el NHS disponga de los medios necesarios para garantizar la seguridad de las mujeres y evitar desenlaces trágicos que, en muchos casos, son evitables”, destaca el comunicado.
Sobre el caso de la embarazada de Barreiro que perdió a su bebé tras ser trasladada al hospital de Cascais, el ministro de Salud aseguró, este viernes, que “no hubo deficiencia” en la atención prestada.
“No hubo deficiencia en la atención, clasificación, derivación ni llegada al lugar, que era, de hecho, el hospital que tenía, en ese momento, las condiciones para la atención perinatal diferenciada, es decir, neonatología”, afirmó Ana Paula Martins.
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