Caterpillar cayó sobre Gaza

No cabe duda de que los productos Caterpillar se están utilizando para cometer violaciones generalizadas y sistemáticas del derecho internacional humanitario en la Franja de Gaza. Basándose en esta observación, el fondo soberano noruego decidió vender su participación en el grupo estadounidense de equipos de construcción, según declaró. Era uno de los diez mayores inversores de Caterpillar, con una participación del 1,2 % del capital, equivalente a 2.400 millones de dólares.

El fondo soberano de inversión, el más rico del mundo, con casi 2 billones de dólares en activos, tomó esta decisión por recomendación de su consejo de ética. Según este, «las autoridades israelíes utilizan excavadoras fabricadas por Caterpillar para la destrucción ilegal generalizada de propiedades palestinas» y la multinacional «no ha implementado ninguna medida para impedir dicho uso». El fondo también se retiró de cinco bancos israelíes acusados ​​de financiar la construcción de asentamientos ilegales en Cisjordania, territorio ocupado desde 1967.

Estas no son las únicas desinversiones del fondo vinculadas a las políticas del gobierno de Benjamin Netanyahu. Tras ser duramente criticado por sus inversiones en Israel, ya se ha retirado de varias empresas, pero aún mantiene participaciones en 38 compañías, con un valor total de 19 000 millones de coronas (1500 millones de francos). Un verdadero dolor de cabeza, según confesó recientemente su principal gestor, Nicolai Tangen, al periódico sueco "Dagens Industri". El tema de las inversiones vinculadas a Israel es "la peor crisis que he conocido", explicó. Hasta ayer, Caterpillar aún no había respondido a esta decisión.