Los trabajadores de la fábrica de Tesla en Suecia llevan más de un año y medio en huelga
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¿Los recientes cargos de los CEO de Tesla, Space X y X (ex-Twitter) podrían finalmente tener un precio? En cualquier caso, los llamamientos al boicot parecen estar teniendo un impacto real en el negocio de Elon Musk. En Francia, las ventas de Tesla cayeron un 63% en enero de 2025. En Suecia, el fenómeno es el mismo: un 44% menos de ventas en enero.
En Suecia, los empleados del mismo empresario están en huelga desde hace más de un año y medio porque Elon Musk se niega a firmar los convenios colectivos del país sobre salarios. Por ello, muchas estaciones de carga ya no reciben suministro eléctrico. Sin embargo, el país tiene una demanda especial de coches eléctricos. En 2024, la cuota de mercado de vehículos eléctricos en el reino se situó en el 58,4%. Ese año, el coche más vendido en el país fue un modelo Tesla, a pesar de la huelga en curso contra el fabricante.
Esta huelga, que se está prolongando, es ya la más larga que el país ha vivido en un siglo. Se trata, por tanto, de un hecho sin precedentes en este país de diálogo, donde por regla general siempre se llega a un compromiso. La culpa quizá la tenga un grupo que no está acostumbrado a las costumbres locales. En Suecia, 9 de cada 10 empleados se benefician de un convenio colectivo; países donde no existe salario mínimo. Son precisamente los sindicatos los que fijan los salarios, negocian los aumentos, el monto de las pensiones e incluso las condiciones de trabajo: todo pasa por el diálogo social. Un modelo al que Tesla claramente no se adhiere. Con esta huelga, los huelguistas defienden la integridad de todo el sistema sueco.
Por este motivo, hasta el momento no se ha llegado a ningún acuerdo, mientras continúa el enfrentamiento entre el sindicato IF Metall y Tesla. Esta huelga incluso había provocado al principio un gran boicot interprofesional : por ejemplo, los carteros habían dejado de entregar correo o matrículas a los Tesla, y los estibadores habían dejado de descargar los coches que llegaban en barco. Solidaridad intersindical, pero también transfronteriza, ya que la huelga se extendió a Dinamarca, Finlandia y Noruega.
Si después de un año y medio la huelga se está ralentizando un poco es también porque Tesla ha contratado a los llamados "rompehuelgas", es decir, trabajadores " desplazados " desde otros países europeos para sustituir a los huelguistas suecos. Suecia y los sindicatos, no acostumbrados a este tipo de subterfugios, fueron tomados por sorpresa.
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