Cécile Duflot: «Hay un problema con la deuda, pero no es un desastre. Hay que poner las cosas en perspectiva».

François Bayrou se puso en una trampa al afirmar que Francia se encaminaba hacia un accidente y que no tenía otra opción. Pero es demasiado y ya no funciona. Vivimos en un mundo saturado de alertas, sirenas, chantajes y palabrotas. Y todos están cansados. Y luego surge una contradicción: si es tan grave, ¿es urgente atribuírselo todo y pedir un voto de confianza ?

Desde hace un año, existe un problema fundamental: este gobierno ha ignorado los resultados de las elecciones legislativas. No hay mayoría, pero, sobre todo, quienes salieron victoriosos fueron los del NFP, que criticaron las políticas implementadas. Así que, si ignoramos estas críticas e intentamos seguir como hasta ahora, nos encontramos contra la pared.

François Bayrou insiste en que no tenemos opción. Pero una expresión famosa dice: la política se trata de elegir. Y se trata de asumir la responsabilidad de las propias decisiones. Por ejemplo, hay una opción que no quiere tomar. Se debatió sobre el impuesto Zucman , es decir, el impuesto mínimo que deben pagar los ultrarricos en Francia. Es de entre 20.000 y 26.000 millones de euros, una cifra considerable. Pero cuando dice «no lo quiero», se cierra la puerta, porque eso es lo que se dijo; significa que está eligiendo.

Estoy de acuerdo en que la deuda tiene un problema, pero no es un desastre; debemos poner las cosas en perspectiva. La deuda es un problema financiero que se puede resolver con decisiones financieras. No es inevitable; es una elección. Y de estos 3 billones, 1 billón son resultado de la política implementada durante los últimos 8 años.

Así que, a veces en política, podríamos ser un poco modestos y admitir que hicimos las cosas mal y que necesitamos corregirlas. Aquí, dice, lo estamos haciendo todo bien, lo sabemos, es serio y si no confían en mí, están llevando a Francia al desastre. Este chantaje no puede funcionar.

Pienso incluso que este chantaje perjudica a la política y es sorprendente que venga de François Bayrou porque es un hombre que siempre ha defendido la proporcionalidad, el equilibrio, el hecho de que podamos dialogar.

Cuando se tiene un Parlamento sin mayoría, hay que unir a la gente. Por dos elecciones consecutivas, los franceses han declarado no tener mayoría en la Asamblea. Creo que eso quizás significa "hablar entre ellos", y tienen razón. Cuando se tiene una situación grave, hay que aunar esfuerzos y trabajar juntos. La situación es grave en lo que respecta a la deuda, la situación ecológica y el agravamiento de las desigualdades.

Pero está el factor humano y resulta que a veces podemos sentirnos ofendidos y quizás este sea el caso de François Bayrou en este momento.